Dejo constancia, rápidamente, de un dossier muy interesante de la Revista Digital Universitaria de la UNAM: dedicado a la literatura fantástica (en especial, a la escrita en México) y coordinado por Gabriela Damián, incluye una antología bastante amplia con textos de numerosos autores que es una muestra de lo actual de la literatura de imaginación en el país; además, ofrece varios textos más sobre el tema (uno demoledor de Óscar Luviano, por ejemplo) y tres videos, en los que otros tantos autores respondemos la misma pregunta: ¿para qué escribir literatura fantástica, si no sirve para nada?
La cuestión no es trivial. Tampoco es solamente una discusión literaria. Lo que está en el fondo no son los gustos de un puñado de autores o los prejuicios de una cultura literaria: la afirmación de que tal y cual cosa (tales obras, personas, discursos) son «lo que vale» en las artes implica una serie de valores estéticos que a su vez implican una postura ante el mundo. Y la mexicana, creo, tiene mucho tiempo de ser más cerrada y más autoritaria de lo que que debería: más resignada a «las cosas como son». El rechazo de la imaginación es el de cualquier cuestionamiento de lo que es; habría que pensar si semejante actitud es la mejor en el presente incierto y en el futuro igual (¿peor?) que ya empezamos a ver.
3 comentarios. Dejar nuevo
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: Dejo constancia, rápidamente, de un dossier muy interesante de la Revista Digital Universitaria de la UNAM: dedicado a la literatura fantástica (en especial, a la escrita en México) y coordinado por Gabriela Damián, inclu……
¿Para qué escribir literatura fantástica?
«…uno de mis anhelos más fuertes es el de lograr la suspensión o violación momentánea de las irritantes limitaciones del tiempo, del espacio y de las leyes naturales que nos rigen y frustran nuestros deseos de indagar en las infinitas regiones del cosmos, que por ahora se hallan más allá de nuestro alcance, más allá de nuestro punto de vista…»»…porque me producen una satisfacción personal y me acercan a la vaga, escurridiza, fragmentaria sensación de lo maravilloso, de lo bello y de las visiones que me llenan con ciertas perspectivas…»
-H.P. Lovecraft-
¡Excelente!